Observa sin absorber:
- Establece la alarma de tu celular para que suene en 8 minutos.
- Cierra los ojos y presta atención a tu respiración, no intentes controlarla.
- Permanece atenta si surge alguna emoción, de ser así solo obsérvala. Atiende a que tan fuerte es, cómo se siente tu cuerpo y mente pero no permitas que se convierta en tu único pensamiento, intenta mantener cierta distancia.
- Permanece de esta manera hasta que se acabe el tiempo.
- Repite cada vez que tengas alguna emoción negativa durante el día.
Al principio te costará un poco, tal vez la emoción te gane y algunas lágrimas se aflojen, pero con la práctica podrás experimentar tus emociones desde una perspectiva más empoderada y será mucho más sencillo atenderlas.
Ahora que sabes qué estas sintiendo algo es momento de resolver ese asunto. Aprender a no apegarte a las emociones no es lo mismo que ignorarlas o hacerte la fuerte, se trata de una herramienta de inteligencia emocional, pero el siguiente paso es definir qué estás sintiendo y por qué.
